Útero arqueado
La afección puede no ser conocida por el individuo afectado y no dar lugar a ningún problema reproductivo; por tanto, se producen embarazos normales. De hecho, no hay consenso sobre la relación del útero arqueado y la pérdida recurrente de embarazos. En consecuencia, la condición puede ser una variación o una patología.
Una opinión sostiene que la condición se asocia con un mayor riesgo de aborto espontáneo, parto prematuro y mala presentación. Así, un estudio que evaluó a mujeres con hemorragia uterina mediante histeroscopia encontró que el 6,5% de los sujetos mostraban el útero arqueado y tenían evidencia de alteraciones reproductivas. Un estudio basado en lesiones arcuatas detectadas por histeroscopia documentó un aumento de las pérdidas fetales y de las complicaciones obstétricas como riesgo para las mujeres afectadas. Woelfer descubrió que el riesgo de aborto espontáneo es más pronunciado en el segundo trimestre. Por el contrario, un estudio en el que se utilizó la ecografía 3D para documentar la prevalencia del útero arqueado en una población ginecológica no encontró pruebas de un mayor riesgo de pérdida reproductiva; en este estudio, el 3,1% de las mujeres tenían un útero arqueado, lo que lo convertía en la anomalía uterina más común; esta prevalencia era similar a la de las mujeres sometidas a esterilización e inferior a la de las mujeres con pérdida recurrente del embarazo.