7 Cosas que pasan si quemas una hoja de laurel | TipHero

Desde la época de los antiguos griegos y romanos, las hojas de laurel han sido consideradas una hierba valiosa y medicinal. Hoy en día, las utilizamos principalmente para condimentar nuestra cocina casera, pero hace siglos estas hojas tenían un propósito muy diferente.

Así como ahora solemos quemar palos o conos de incienso, las hojas de laurel se quemaban antiguamente (y en algunos lugares, todavía se queman) en los hogares y lugares de culto. Algunas razones eran religiosas, otras incluso fantásticas, pero otras se basaban en el hecho científico de que las hojas de laurel contienen una mezcla de sustancias químicas beneficiosas para el organismo.

Aquí tienes algunos beneficios para la salud que podrías experimentar si pruebas a quemar hojas de laurel en tu casa.

Alivia la ansiedad

La quema de hojas de laurel se ha utilizado como forma de aliviar el estrés durante siglos. La combinación de sustancias químicas (concretamente el linalol) de las hojas crea un humo que, al ser inhalado, calma el cuerpo y la mente. Las personas que queman hojas de laurel con regularidad señalan que el humo les pone en un «estado psicodélico», pero no les cansa; el humo puede calmar su cuerpo y, al mismo tiempo, animarles.

La Asociación Americana de Enfermeras Anestesistas llevó a cabo un estudio reciente en el que se descubrió que el linalol reducía en gran medida la ansiedad y, además, mejoraba las interacciones sociales entre las personas que estaban bajo su influencia. El estudio dedujo que los sujetos sintieron los efectos de las hojas en menos de 10 minutos de inhalar los vapores.

Reducir la inflamación

Algunas de las propiedades medicinales de las hojas de laurel incluyen la reducción de la inflamación en el cuerpo, especialmente dentro de sus articulaciones. Este efecto curativo proviene de la sustancia química eugenol, que se encuentra en las hojas de laurel y actúa como una cura antiinflamatoria totalmente natural.

Aumentar el sistema inmunológico

Subbotina Anna

El eugenol también tiene propiedades antioxidantes y las propias hojas de laurel están repletas de otras vitaminas y minerales necesarios para un alto funcionamiento del cuerpo. Por ello, quemar e ingerir hojas de laurel tiene la capacidad de reforzar tu sistema inmunológico.

¡Prueba a quemar algunas hojas o a añadir algunas como condimento a la cena la próxima vez que no puedas librarte de un resfriado!

Para este beneficio, los expertos sugieren consumir de 1 a 3 gramos de hojas de laurel al día para ver los mejores resultados, tal y como se demostró en un estudio publicado en la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. El consumo de esta cantidad de hojas de laurel durante 30 dejó los niveles de insulina de los sujetos decididamente más regulares que antes del estudio, lo que lleva a los investigadores a creer que las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias pueden ayudar a aliviar algunos síntomas de la diabetes de tipo II.

Aumentar el estado de alerta

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Como hemos mencionado antes, el humo de las hojas de laurel puede tener un efecto calmante, pero también aumenta el estado de alerta. De hecho, ¡la quema de hojas de laurel se utiliza a menudo para combatir la fatiga crónica! Algunas de las sustancias químicas de las hojas de laurel, como el pineno, el cineol y la elemicina, combaten la sensación de cansancio y dan un agradable impulso de energía a quienes inhalan el humo.

Abre el sistema respiratorio

Las hojas de laurel son un remedio natural que puede ayudar a tratar las vías respiratorias y los pulmones obstruidos y atascados. Actúa de forma natural para ayudar a romper y eliminar la desagradable mucosidad y flema que está causando todos los problemas. En lugar de quemar las hojas, remójalas en agua limpia o coge un pequeño frasco de aceite de laurel y úsalo en un humidificador para crear un vapor que luego respirarás. También puedes simplemente hervir el agua tratada en la estufa o frotar el aceite en la zona del pecho para aliviar los problemas respiratorios, las alergias y el asma.

Aumenta la atención plena

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Dado que las hojas de laurel te ponen en un estado más elevado de calma Y conciencia, se dice que usar las hojas como incienso durante la meditación es especialmente eficaz. No hay ninguna investigación médica sobre esta afirmación, sin embargo, los usuarios frecuentes asocian el humo de las hojas de laurel con una práctica de meditación más consciente.

Esta línea de pensamiento se remonta a la antigua historia griega de Apolo y Dafne. La mitología dice que Dafne se transformó en un laurel para escapar de los ansiosos avances del dios Apolo, y los griegos asociaron desde entonces las hojas del laurel con propiedades espirituales. Las hojas se han quemado en los templos durante siglos para ayudar a aumentar la concentración en la oración y la meditación.