A tu bebé le gusta que le frotes la barriga, según la ciencia
Si hay algo que la mayoría de las mujeres embarazadas tienen en común es que no pueden apartar las manos de su creciente barriga. Para algunas futuras mamás, tocar, acariciar, frotar y sostener constantemente su vientre puede ser reconfortante. Para otras, es una forma de sentirse cerca del bebé que llevan dentro. Y, por supuesto, están las futuras mamás que simplemente tienen gases.
Si estás embarazada, sabes que frotarte la barriga simplemente te hace sentir bien sin importar la razón. (Y durante el embarazo, las cosas que se sienten bien son siempre una gran ventaja). Ahora, un nuevo estudio confirma que los fetos responden poderosamente a las caricias en el vientre, lo que puede sugerir que también les hace sentir bien.
Qué analizó el estudio
En 2015, los investigadores de la Universidad de Dundee, en Escocia, examinaron a 23 mujeres embarazadas en su segundo y tercer trimestre mientras realizaban tres actividades: hablar, acariciar sus vientres y permanecer quietas con las manos a los lados. Utilizando ecografías y siguiendo los movimientos de los bebés en el útero, los investigadores descubrieron no sólo que los bebés se movían más durante la actividad de tocar, sino también que respondían al tacto en un estado de gestación mucho más temprano de lo que se había documentado anteriormente.
A partir de esta investigación, el nuevo estudio examinó a 28 mujeres embarazadas en su segundo y tercer trimestre para ver si los bebés respondían a los toques del vientre de sus madres, y si sus respuestas diferían cuando eran tocados por su madre, por su padre y por un extraño al azar.
Lo que encontró el estudio
Los fetos en el segundo y tercer trimestre mostraron una sorprendente diferencia cuando experimentaban toques familiares por parte de su madre y ningún toque: Los del tercer trimestre respondieron más al toque familiar que al no ser tocados, mientras que los del segundo trimestre mostraron poca respuesta a ambos. Los estudios eran realmente pequeños, pero según los investigadores, las pruebas sugieren que los bebés se sienten más cómodos y responden mejor a quienes les rodean cuanto más crecen y cuanto más se desarrolla y madura su sistema nervioso central.
Qué significa la investigación para ti
¡Sigue frotando ese precioso bulto, mamá! Es una gran estimulación y una forma fácil de hacer que tu futuro bebé se mueva por ahí (especialmente en la semana 28, cuando empiezas a contar las patadas). Además, cuanto más interactúen tú y tu pareja con tu futuro hijo o hija -cantando, hablando o tocando-, más familiarizado estará tu bebé con la vida que le espera fuera.
Sentir que tu futuro bebé reacciona a tus caricias es una forma muy poderosa de establecer un vínculo con él o ella, especialmente durante esos largos meses de embarazo en los que estás desesperada por conocer a tu pequeño. Nunca es demasiado pronto para empezar a mostrar amor y afecto a esa pequeña persona que tendrá tu corazón para siempre. Además, imaginar que te toca y te devuelve el cariño puede hacer que la espera sea un poco más llevadera.
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