Amazon está gastando dinero sin reparos en el envío en un día

Amazon trató de advertirles.

En abril, el director financiero Brian Olsavsky dijo a los inversores que la compañía gastaría 800 millones de dólares en el segundo trimestre para la transición al envío en un día para Prime, el programa de membresía de la firma Amazon. «Este es un paso significativo y nos llevará tiempo conseguirlo», advirtió.

Ayer (25 de julio) Amazon compartió los resultados de ese segundo trimestre. La compañía obtuvo un beneficio trimestral de 2.600 millones de dólares, por debajo de los 2.800 millones que esperaban los analistas. Los ingresos de explotación, una medida de los beneficios obtenidos de las operaciones de una empresa, se situaron en 3.100 millones de dólares, 600 millones menos de lo esperado.

En una llamada posterior al anuncio de los resultados, Olsavsky admitió que Amazon había ido «un poco más allá» de los 800 millones de dólares previstos en costes trimestrales. Hubo costes para la transición de los almacenes y el traslado del inventario más cerca de los consumidores. La productividad disminuyó. «Sí crea un shock en el sistema», dijo Olsavsky a los inversores.

A Wall Street no le gustó. Las acciones de Amazon cayeron más de un 2% en las operaciones posteriores al cierre.

Hace menos de cinco años, los inversores se habrían alegrado mucho con esos resultados. Amazon es famosa por haber perdido dinero durante sus primeros 17 trimestres consecutivos como empresa pública, con una pérdida combinada de 2.800 millones de dólares. Una vez que Amazon empezó a ganar dinero, hizo muy poco. Amazon declaraba decenas de miles de millones de dólares de ventas cada trimestre, pero apenas decenas o cientos de millones de dólares de beneficios. A pesar de ello, Wall Street adoraba el negocio. Amazon era la rara empresa que entrenaba a los inversores a aceptar pérdidas a corto plazo, o beneficios mínimos, a cambio de una inversión sostenida en el futuro de la empresa.

En 2016, Amazon comenzó a obtener consistentemente un modesto beneficio trimestral, un patrón que continuó en 2017. Luego, en 2018, Amazon hizo algo extremadamente fuera de lo común: Ganó mucho dinero. En todo el año 2018, Amazon obtuvo 10.000 millones de dólares de beneficios, más que sus ingresos netos de los 10 años anteriores juntos.

Ahora Amazon ha vuelto a ser muy Amazon. La inversión en el envío en un día es una empresa de Amazon por excelencia: cara, audaz e implacablemente orientada al cliente. A Jeff Bezos, consejero delegado de Amazon, le gusta hablar de una «rueda de inercia» empresarial, en la que las inversiones en precios bajos y envíos gratuitos conducen a más ventas y más clientes, lo que ayuda a la empresa a aumentar la eficiencia y generar ahorros de costes, que se invierten de nuevo en el negocio, haciendo girar la rueda de inercia de nuevo. Amazon cree que el envío en un día hará que su característica membresía Prime sea aún más irresistible para los consumidores.

«Refuerza su decisión de compra», dijo Olsavsky en la llamada de ayer. «Refuerza la necesidad de no tener que ir a otro sitio para comprar un producto porque lo necesitas rápidamente. Así que creo que se convierte en parte de tu rutina».

Amazon puede hacer girar el volante cuando quiera. Como dicen en finanzas, el rendimiento pasado no es indicativo de los resultados futuros.