Amilina: historia y visión general
La presencia de depósitos amiloides en el páncreas se describió por primera vez a principios del siglo XX. Sin embargo, no fue hasta 1987 cuando se identificó la estructura de la molécula de amilina. La amilina es una hormona peptídica de 37 aminoácidos que las células beta del páncreas secretan junto con la insulina en respuesta a un estímulo nutritivo. Es deficiente en los pacientes con diabetes de tipo 1 y elevada en los pacientes en las primeras etapas de la diabetes de tipo 2, una condición que se caracteriza por la hiperinsulinemia. También se ha descrito una elevación de los niveles de amilina en plasma en pacientes con intolerancia a la glucosa, en sujetos obesos y en mujeres embarazadas tanto con tolerancia normal a la glucosa como con diabetes mellitus gestacional. Sin embargo, parece que los déficits de secreción de amilina aparecen antes que los de insulina en pacientes en las últimas fases de la diabetes de tipo 2. Los primeros estudios experimentales sugirieron que la amilina inhibe la secreción basal de insulina e induce la resistencia a la insulina en el músculo esquelético, lo que llevó a la hipótesis de que tiene un papel en la etiología de la diabetes de tipo 2. Sin embargo, una serie de estudios experimentales más recientes han indicado que la amilina es una tercera hormona activa de los islotes pancreáticos que trabaja con la insulina y el glucagón para mantener la homeostasis de la glucosa. La amilina parece regular la entrada de glucosa en la circulación influyendo en la velocidad de vaciado gástrico y, por tanto, en la velocidad a la que la glucosa derivada de las comidas entra en el sistema, y también inhibiendo la liberación de glucosa y la producción hepática de glucosa en el periodo posprandial.