Anoikis
El mecanismo por el que las células tumorales invasoras sobreviven al proceso de anoikis sigue siendo muy desconocido. Hallazgos recientes sugieren que la proteína TrkB, más conocida por su papel en el sistema nervioso, podría estar implicada junto con su ligando, el factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF). Parece que TrkB podría hacer que las células tumorales sean resistentes a la anoikis mediante la activación de la cascada de señalización de la fosfatidilinositol 3-cinasa (PI3K).En el carcinoma de células escamosas, los investigadores han descubierto que la resistencia a la anoikis puede inducirse a través del factor de crecimiento de los hepatocitos (HGF), que activa TANTO la señalización extracelular como la quinasa receptora (ERK) y la PI3K.
Usando un novedoso ensayo de cribado de alto rendimiento, Mawji et al. demostraron que la anisomicina puede sensibilizar a las células epiteliales metastásicas a la anoikis y reducir la implantación de células tumorales circulantes in vivo. La anisomicina logró esta actividad antimetastásica en parte por la disminución de la abundancia de la proteína inhibidora del receptor de muerte FLIP. En un trabajo relacionado, el equipo de Schimmer demostró que los niveles de FLIP son más altos en las células metastásicas que en las no metastásicas, y que la reducción de los niveles de FLIP mediante ARNi (ARN de interferencia) u otros inhibidores de moléculas pequeñas de FLIP puede sensibilizar a las células metastásicas a la anoikis. Dado que FLIP es un inhibidor de la anoikis, y que la reducción de FLIP puede sensibilizar a las células metastásicas a la anoikis, Mawji et al. plantean la hipótesis de que la reducción de FLIP puede ser una estrategia terapéutica viable contra la metástasis del cáncer.
Las células cancerosas desarrollan resistencia a la anoikis por varios mecanismos, incluyendo cambios en la señalización de integrinas y matrices, desregulación metabólica y respuestas al estrés de las células cancerosas.Un mecanismo clave que independiza a las células cancerosas de la adherencia a los tejidos es la desregulación de la red de vías que controla el factor de transcripción NF-κB.