Ba’al

Ba’al era un Goa’uld, y uno de los últimos Señores del Sistema. En su día fue un subordinado de la Segunda Dinastía Goa’uld, pero Ba’al dejó el servicio de Ra y ascendió a una posición de poder entre los Señores del Sistema por derecho propio. Tras la caída de los Goa’uld a manos de los Replicantes, Ba’al fue el único Señor del Sistema superviviente conocido y se empeñó en reconstruir su base de poder. Tuvo cierto éxito con sus clones, pero con el tiempo todos fueron asesinados, siendo el último extraído por los Tok’ra. El verdadero Ba’al fue finalmente asesinado por el Coronel Cameron Mitchell, que le tendió una emboscada cuando intentó alterar la historia. Mitchell disparó a Ba’al en la cabeza, matándolo, y con la muerte de todos sus clones, Ba’al desapareció definitivamente, aunque el huésped de uno de sus clones sobrevivió.

Biografía

Segunda Dinastía Goa’uld

Visto por primera vez durante la Segunda Dinastía Goa’uld, Ba’al fue originalmente uno de los prominentes subalternos de Ra al servicio de éste en la Tierra, donde los cananeos lo consideraban hijo de El -que era, en realidad, Ra-. Fue en este papel que supervisó el desarrollo de un sistema agrícola en muchas culturas, los cananeos y los fenicios entre ellos. La influencia de Ba’al se extendió tanto por estas culturas que era conocido en toda la cuenca mediterránea y, con el tiempo, en la mayor parte del planeta.

Sin embargo, rara vez se le veía como un supervisor amable y, de hecho, cada vez que su pueblo no cumplía con sus estrictas cuotas de producción de alimentos, muy a menudo daba órdenes para el sacrificio masivo de vidas humanas. Aunque estas medidas condujeron a una prosperidad general tanto para los Goa’uld como para el pueblo, fue a costa de mucha gente, por lo que quizás no sea una sorpresa que Ba’al fuera uno de los primeros Goa’uld en encontrarse con una rebelión entre su pueblo, aunque fue a una escala mucho menor que el posterior castigo de Ra. Unas cuantas aldeas más pequeñas abandonaron el culto a él y entonces, por su orgullo, Ba’al las abatió.

Fue durante la época en que los Goa’uld gobernaban la Tierra cuando fue enviado a Kinahhi -bajo el nombre de Re’ammin el Tronador- para matar a su gobernante, el rey Yahm, cuando cayó del favor de los Goa’uld. Arrojó el cuerpo de Yahm a los océanos del planeta y erigió una ciudad flotante, Tsapan, en el lugar de su muerte; esto marcó el comienzo de la esclavitud del pueblo Kinahhi a los Goa’uld. Sin embargo, los habitantes del planeta acabaron levantándose contra Re’ammin, utilizando su propia tecnología contra él, y obligándole a huir del planeta. Durante este tiempo, Ba’al fue capaz de utilizar su tecnología gravitatoria para crear agujeros negros mientras utilizaba un dispositivo antigravedad de los Antiguos como escudo para no verse afectado por ellos. Tras ser derrocado en Kinahhi, se llevó la fuente de energía de su escudo, pero dejó el resto de la tecnología atrás, huyendo a su mundo fortaleza. Los demás Señores del Sistema le prohibieron volver a Kinahhi, ya que temían lo que podría hacer con el escudo y la tecnología antigravitatoria de que disponía, por lo que colocó la fuente de energía del escudo en un santuario de su mundo fortaleza y, aunque siguió experimentando con la tecnología gravitatoria, lo hizo a una escala mucho menor. En algún momento después de esto, mientras los Goa’uld aún gobernaban la Tierra, Ba’al fue muerto temporalmente por Mot y luego resucitado a través de un sarcófago por su «hermana», Anat. (SG1: «Una cuestión de honor», «El coste del honor»)

Después de la caída de la Segunda Dinastía Goa’uld, Ba’al fue uno de los primeros en prever que los Tau’ri se rebelarían algún día, por lo que abandonó el planeta para dirigirse a las estrellas, lo que le valió la ira de su antiguo maestro Ra, y le hizo ser expulsado del círculo íntimo del Dios del Sol. A pesar de este contratiempo, Ba’al consiguió mantener el control de varios Jaffa que habían sido leales a Ra y así pudo hacerse un pequeño hueco entre las filas de los Señores del Sistema. Aunque no eran totalmente leales a Ba’al, estos Jaffa le servían por miedo a su ira ya que, aunque sabían que la ira de Ra sobre ellos sería terrible si conseguía derrotar a Ba’al, éste representaba una amenaza más inmediata para ellos. Además, Ba’al no dudaba en convertir en ejemplo a cualquiera que le traicionara ante su antiguo señor.

Después de la Rebelión de los Tau’ri, la atención de Ra se centró en Ba’al, a quien pudo derrotar repetidamente hasta que, desesperado, Ba’al se dirigió a Sokar -cumpliendo irónicamente la creencia de ese Tau’ri de que era en realidad Ba’alzebub, el agente de Satán. Consciente de la enemistad de Sokar con Ra, Ba’al le ofreció un contingente de sus Jaffa -varios de ellos habían sido de hecho siervos del propio Ra en algún momento- para que se enfrentara a Ra en el campo de batalla. Aunque las fuerzas de Sokar eran más que suficientes para enfrentarse a Ra por sí solas, las antiguas fuerzas de Ra proporcionaban una visión única del funcionamiento de las tácticas de su antiguo señor, por lo que resultaron muy valiosas para Sokar. A cambio de esta ayuda, Sokar tomó a Ba’al bajo su ala durante un tiempo, ayudándole en su lucha por sobrevivir contra su mutuo enemigo.

Esta alianza se mantuvo durante generaciones, durante las cuales Ba’al se aprovechó de la ayuda de Sokar, utilizando tanto sus propias fuerzas como las de su nuevo «amo» para forjar un importante reino entre los planetas de la Vía Láctea. Dado que muchos de estos logros se consiguieron con la ayuda de los Jaffa de Sokar, éste consideraba que el territorio era suyo, aunque rara vez insistió en esta cuestión y se limitó a dejar tranquilo a Ba’al, concentrándose en su propia guerra contra Ra. Ba’al continuó pagando tributo y dando respeto a Sokar durante el transcurso de su «servidumbre», así como proporcionando un amortiguador contra las fuerzas de Ra con su territorio cada vez mayor que permitía a Sokar concentrarse a lo largo de una frontera más estrecha.

Ba’al no pudo ocultar sus verdaderas intenciones para siempre, sin embargo, subvirtiendo gradualmente a los Jaffa que Sokar le dejó hasta el punto de comandar su verdadera lealtad. Al final, satisfecho de poder enfrentarse a las fuerzas de Ra sin la ayuda de Sokar, Ba’al rompió su servidumbre a Sokar y se declaró gobernante soberano de su sector del espacio. Sokar trató inmediatamente de retirar a sus Jaffas del servicio de Ba’al, pero no obtuvo respuesta, por lo que envió dos de sus flotas para reclamar el territorio que creía que Ba’al le había robado. Al enterarse de su ataque, Ba’al realizó una arriesgada táctica; cuando las flotas de Sokar llegaron a dos de los sistemas controlados por Ba’al, se encontraron con sólo dos ha’taks cada una. Cuando las flotas de Sokar se acercaron para atacar a las naves, Ba’al desató su plan y utilizó los ha’tak para hacer que las estrellas de los sistemas se convirtieran en supernovas, destruyendo todo lo que había cerca, incluidos ellos mismos y los sesenta millones de habitantes de los mundos.

Decidiendo rápidamente que el precio de una guerra con Ba’al era demasiado alto para pagarlo, Sokar y Ba’al acordaron un tratado de paz para poder centrarse en su principal oponente, Ra. Durante siglos, la tregua se mantuvo, y ambos Goa’uld lucharon contra Ra en lugar de hacerlo entre ellos. Aunque la guerra se cebó con Ba’al, éste consiguió situarse en una posición de poder y finalmente se convirtió en un Señor del Sistema por derecho propio. La guerra de Ba’al con Ra se prolongó hasta llegar a un punto en el que la tasa de desgaste se hizo insoportable para ambos, por lo que los dos acordaron un alto el fuego, aunque seguían siendo enemigos de corazón. A pesar de esto, los dos Señores del Sistema continuaron infligiendo incursiones encubiertas al otro, así como atacándose mutuamente a través de la política en lugar de la fuerza.

Estas acciones continuaron durante más de mil años hasta que, en lo que aparentemente fue un extraño accidente, Ra dejó de existir. Sin que los Señores del Sistema lo supieran entonces, Ra fue asesinado por el coronel Jack O’Neill y el doctor Daniel Jackson, que habían utilizado anillos de transporte para enviar una cabeza nuclear mejorada a bordo de su nave tras una rebelión en Abydos. Aunque los Goa’uld no sabían la verdad que había detrás de la repentina muerte, Ba’al se apresuró a abalanzarse y reclamar gran parte del desordenado territorio de Ra antes de que Apofis pudiera hacerse con el control de la mayor parte del mismo. Utilizó este nuevo territorio para hacerse con una posición preeminente entre los Señores del Sistema, obteniendo incluso más poder del que tenía anteriormente.

2002

Cuando los Señores del Sistema celebraron una conferencia tras la muerte de Apofis y Cronos, Ba’al parecía funcionar como el primero entre iguales, dirigiendo la reunión. Cuando Osiris se presentó en nombre de Anubis para solicitar a los Señores del Sistema que le aceptaran de nuevo -con la condición de que Anubis, a su vez, destruyera a los Tau’ri-, Ba’al fue uno de los que votó a favor de devolverle el estado de Señor del Sistema. Lo que la mayoría de los demás Señores del Sistema no sabían era que se trataba simplemente de una estratagema para obtener más información sobre su potencial enemigo. Sin embargo, este mismo acto le valió a Ba’al la ira de Yu, una enemistad que hasta entonces sólo se había manifestado en forma de tensiones menores, que desembocaron en hostilidades abiertas. (SG1: «Summit», «Last Stand»)

La Tok’ra tenía al menos un operativo, Kanan, al servicio de Ba’al aunque, cuando Kanan fue descubierto como espía, su huésped quedó tan dañado que tuvo que buscar otro. Cuando el simbionte de Kanan fue implantado en Jack O’Neill, éste regresó al puesto de avanzada de Ba’al para salvar a Shallan, la lo’taur de Ba’al, con la que se había involucrado. Sin embargo, los Jaffa de Ba’al lograron capturar a O’Neill antes de que pudiera terminar su misión, aunque Kanan lo abandonó para que Ba’al no pudiera recuperar la información de la Tok’ra de él. Ba’al torturó a O’Neill sin cesar, matándolo muchas veces y devolviéndolo a la vida para conseguir la información que Kanan había dejado en su mente. Sin embargo, cuando el SG-1 informó a Yu de que Ba’al había estado realizando investigaciones armamentísticas en el planeta, envió una flota que destruyó las instalaciones y liberó así a O’Neill. (SG1: «Abyss»)

2003

Sin que Ba’al lo supiera, su «leal» Underlord Mot estaba conspirando contra él, habiendo tomado el control de P4S-237 cien años antes, después de que Ba’al lo abandonara, creyendo que sus minas de Naquadah se habían agotado. Mot planeaba utilizar la situación para ganar el favor de Anubis y el poder, ya que Ba’al había caído del favor de Anubis con sus derrotas ante Lord Yu. Con la ayuda de los aldeanos, el SG-1 derrotó a Mot y lo mató, salvando a Ba’al de sus planes, desconocidos por el propio Ba’al. (SG1: «Prophecy»)

Anubis fracasó posteriormente en sus intentos de destruir a los Tau’ri y avanzó contra los otros Señores del Sistema, demostrando una flota impresionantemente poderosa a la que sólo la flota combinada de los Señores del Sistema podía esperar enfrentarse. Aunque originalmente se le dio a Yu el cargo de dirigir las fuerzas de la Alianza Unida de los Señores del Sistema, su creciente senilidad le dejó incapaz de hacerlo, por lo que Teal’c y Oshu convencieron a Ba’al para que asumiera el control de la flota y dirigiera la guerra contra Anubis. Con Anubis en la atmósfera de Langara haciendo que su escudo se debilitara, atacó y destruyó la nave nodriza de Anubis pero éste escapó en su cápsula de escape. (SG1: «Homecoming»)

Poco tiempo después, conquistó el planeta Erebus y sus Jaffas capturaron a Bra’tac y Rya’c. El campamento fue liberado por el SG-1 y Rak’nor. (SG1: «Orpheus»)

2004

Después de la caída de Anubis, Ba’al se apoderó de la mayor parte de las antiguas posesiones de Anubis, incluidos los guerreros Kull y la tecnología de rayos y hologramas de Asgard, para poder hacer la guerra a los demás Señores del Sistema y convertirse en el más poderoso de ellos. Esto llevó a los demás Goa’uld a un intento fallido de negociar con los Tau’ri para obtener su apoyo contra Ba’al. (SG1: «Nuevo Orden, Parte 1», «Nuevo Orden, Parte 2»)

Cuando el SG-1 quedó atrapado en la base de Anubis en P2X-887, aprovechó la oportunidad y mintió al general de brigada Jack O’Neill y afirmó haberlos capturado. Ofreció un intercambio, el SG-1 por Camulus. O’Neill finalmente aceptó y Camulus le fue entregado con su ZPM supuestamente amañado para asesinar a Ba’al. Esto fracasó ya que O’Neill entregó a Camulus un ZPM muerto y más tarde se afirmó que Ba’al mató a Camulus. (SG1: «Zero Hour», «Prometheus Unbound»)

Tras la muerte de Moloc en Hak’tyl ll, Ba’al reclamó sus dominios y fuerzas como propios. (SG1: «Sacrificios»)

2005

Ba’al comenzó rápidamente a conquistar a los demás Señores del Sistema utilizando las fuerzas de Anubis y, en el plazo de un año, los Señores del Sistema habían quedado reducidos a otros tres, todos ellos incapaces de luchar contra él. Sin embargo, en algún momento Anubis logró regresar y retomar en secreto el control de sus fuerzas de Ba’al. Ba’al se vio obligado a servir bajo las órdenes de Anubis, para su disgusto. En ese momento, Ba’al comenzó a autoproclamarse Comandante Supremo del Imperio Goa’uld. Sin embargo, en secreto, estaba sirviendo a Anubis. Como resultado de su avance, muchos Señores del Sistema se retiraron a los planetas que una vez habían gobernado pero que abandonaron para utilizarlos como fortalezas y escondites. Entre ellos estaba Ares, que intentó retomar el mundo de Arkhan, pero fue asesinado por el general de brigada Jack O’Neill, que destruyó su Ha’tak con el Saltador del Tiempo, lo que presumiblemente llevó a Ba’al a absorber también el territorio de Ares. (SG1: «It’s Good to Be King»)

El avance de Ba’al contra los otros Señores del Sistema sólo fue detenido por la largamente esperada invasión de los Replicantes en la Vía Láctea. Las armadas Replicantes lideradas por la Replicante Carter rápidamente abrumaron y destruyeron a los Señores del Sistema Goa’uld, y Ba’al se encontró luchando una batalla perdida contra los invasores. Cuando se descubrió en Dakara el conocimiento de una superarma de los Antiguos capaz de destruir toda la vida en la galaxia, Ba’al ayudó en secreto al yo humano original de la Replicante Carter, la Teniente Coronel Samantha Carter y el padre de Sam, Jacob Carter, a modificar el arma, junto con el Dispositivo de Inicio de Marcación asociado al Stargate de Dakara, destruyendo a todos los Replicantes de la galaxia. Ba’al se dirigió entonces a recuperar Dakara cuando los Jaffa rebeldes asaltaron su nave, obligándole a transportarse. Esto condujo efectivamente al fin del Imperio Goa’uld, ya que la huida de uno de sus «dioses» demostró a todos los Jaffa que los Goa’uld no eran los dioses que decían ser.

Incluso con los Replicantes destruidos, Anubis seguía teniendo la intención de reclamar la superarma para sí mismo y utilizarla para destruir toda la vida en la galaxia. Anubis permitió que Ba’al viviera para que pudiera ser testigo del fin de toda la vida galáctica. Cuando el plan de Anubis fue frustrado por el Dr. Daniel Jackson y Oma Desala, Ba’al quedó como el único Señor del Sistema superviviente conocido, ya que los demás fueron asesinados por los Replicantes y Anubis fue contenido por Oma Desala. (SG1: «Reckoning, Part 1», «Reckoning, Part 2», «Threads»)

Artículo principal: El clon de Ba’al (Ex Deus Machina)

Desaparecida su base de poder tras la destrucción de los Señores del Sistema y la rebelión de los Jaffa, Ba’al necesitaba un lugar donde esconderse. Huyendo a la Tierra, Ba’al se estableció como hombre de negocios y se hizo con el control de The Trust, al mismo tiempo que utilizaba la tecnología de clonación de Asgard para crear una serie de clones de sí mismo. También colocó una bomba de Naquadah en un edificio de Seattle y amenazó con volarlo si el Comando Stargate y los Jaffa intentaban matarlo. Atacaron de todos modos y el edificio fue transportado al espacio y uno de estos clones fue capturado y ejecutado por Gerak y sus Jaffas, el verdadero Ba’al y una cantidad indeterminada de clones escaparon, permitiéndoles instituir una serie de planes para recuperar su base de poder. (SG1: «Ex Deus Machina»)

2006

Artículo principal: Clon de Ba’al (Stronghold)

Más tarde, Ba’al consiguió recuperar un ejército reclutando Jaffas, en gran parte mediante el uso del lavado de cerebro. Uno de los clones de Ba’al inició un plan para tomar el control del Alto Consejo Jaffa para impedir su ascenso a la democracia con su tecnología de lavado de cerebro, convirtiendo a miembros clave del Alto Consejo Jaffa en contrarios a la idea de la democracia. En su momento, Ba’al se limitó a afirmar que esto se hizo para proporcionar un liderazgo fuerte (en su forma) para ayudar a los Jaffa contra la nueva amenaza emergente de los Ori, pero Vala Mal Doran (a quien Ba’al había conocido previamente bajo la apariencia de Qetesh) opinó más tarde que la subversión del consejo se hizo para obtener el control de la superarma Dakara, utilizándola para destruir toda la vida en la galaxia (algo planeado por el anterior maestro de Ba’al, Anubis), aparte de Ba’al y sus esclavos. Esto habría provocado que los Ori perdieran el interés por la galaxia. Aunque Ba’al indicó que este era el caso, diciendo que no era un plan muy original, el plan fue frustrado y el clon fue asesinado por Teal’c. (SG1: «Stronghold», «Insiders»)

Artículo principal: El clon de Ba’al (Off the Grid)

Ba’al también planeaba reconstruir su imperio utilizando el transportador Asgard para robar Stargates de otros planetas y esconderlos utilizando un método desarrollado por Nerus, el antiguo sirviente de Ba’al que desertó a los Ori y fue capturado por el Comando Stargate. Su plan se frustró cuando Nerus volvió a Ba’al y descargó accidentalmente un virus en uno de los Ha’tak de Ba’al. Los Stargates fueron entonces transportados fuera del Ha’tak por la nave terrestre recién construida, la Odisea, y el Ha’tak -junto con varios clones de Ba’al- fue destruido por la Alianza Lucian. (SG1: «Off the Grid»)

Más tarde, Ba’al pilotó un Al’kesh hacia la Tierra y fue derribado por los F-16 Fighting Falcons. Fue capturado y llevado al Comando Stargate. Fue interrogado por el SG-1 y les dijo que sus clones se habían vuelto contra él y que el SGC necesitaba capturarlos porque tenían conocimiento del Sangreal. Colocó balizas de localización en todos ellos y utilizaron el sistema de seguimiento del Al’kesh para capturarlos. Después de que todos los clones fueran capturados, Malcolm Barrett, a quien le lavaron el cerebro, ayudó a Ba’al a escapar. Obligó a la Teniente Coronel Samantha Carter a darle la lista de direcciones del Stargate de los Antiguos y utilizaron los chips de localización, que al estar muy cerca unos de otros, amplificaron la señal que enviaron y fueron transportados fuera. (SG1: «Insiders»)

Cuando descubrió la existencia del arma Anti-Ori de Merlín que no sólo podía destruir a los Ori, sino también a los Antiguos, uno de los clones de Ba’al encontró el planeta donde se encontraba el arma. Sus naves no pudieron localizarlo, así que tuvo que venir por el Stargate. Sin embargo, los rompecabezas creados por la Antigua ascendida Morgan Le Fay hicieron imposible que Ba’al llegara a él. Sus Jaffas lo abandonaron, tratando de encontrar la forma de liberarlo de un campo de fuerza. Entonces se vio obligado a trabajar junto al SG-1 y Adria. Fue transportado a la tumba de Myrddin cuando se despertó el Antiguo que, en su aturdimiento, comparó a Ba’al con Mordred. Ba’al intentó durante el resto del tiempo encontrar una forma de llamar desde el Stargate del planeta, que estaba bloqueado en un sistema aleatorio que transportaba a los ocupantes de la tumba de Myrddins a mundos aleatorios en un sistema de puertas cerradas para evitar ser descubiertos por los Ori. Cuando Adria descubrió la localización del mundo, Ba’al fue aturdido por el Comandante Ori con su arma aturdidora Ori. Su destino posterior es desconocido. Es posible que Ba’al muriera o quedara varado en el planeta. (SG1: «The Quest, Part 1», «The Quest, Part 2»)

2007

Artículo principal: Clon de Ba’al (Dominio)

Con los Ori haciendo tales avances en la Vía Láctea, Ba’al ideó un ingenioso plan. Pretendía capturar a Adria y tomarla como huésped, emboscando el plan del SG-1 para capturar a los Ori. Tras capturarla, Ba’al envió un mensaje a sus clones para que se reunieran para discutir la situación. Una vez que llegaron, envió botes de veneno simbionte al campamento, matando a sus clones. Tras implantarse en Adria, el SG-1 abordó su Ha’tak y mató a otro clon. Ba’al se ofreció a ayudar al SG-1 a expulsar al Ejército Ori de la galaxia, diciendo que los Ori estaban realmente muertos. Sin embargo, el SG-1 contactó con la Tok’ra, que sacó a Ba’al de Adria, presumiblemente matándolo, pero no antes de que liberara su toxina simbionte en ella. El Teniente Coronel Cameron Mitchell también expresó algunas dudas sobre si Ba’al estaba realmente muerto o no, temiendo que uno o más de los clones pudieran haber sobrevivido. (SG1: «Dominio»)

En el momento del encuentro de la expedición de Atlantis con el pícaro Asgard Fenrir, los Tau’ri y la Nación Jaffa Libre estaban planeando un ataque conjunto a una de las bases de Ba’al. Una flota de la Nación Jaffa Libre y la Odisea se reunieron en Golla IX para preparar este ataque, lo que obligó al Teniente Coronel John Sheppard y al Dr. Rodney McKay a reunirse con la Odisea en el planeta para acceder al núcleo informático Asgard. (SGA: «Nightfall»)

2008

Artículo principal: Clon de Ba’al (Continuum)

A pesar de estas muertes, tanto el verdadero Ba’al como al menos un clon sobrevivieron. El clon fue finalmente localizado a través de su dispositivo de rastreo -el verdadero Ba’al es aparentemente el único Ba’al capaz de eliminar su dispositivo-. Llevado al mundo natal de los Tok’ra para someterse a una extracción, el clon advirtió al SG-1 y al general Jack O’Neill de que habían cometido un terrible error, ya que el verdadero Ba’al contaba con un dispositivo de seguridad en caso de que se produjera tal eventualidad. A pesar de las advertencias del clon, la Ceremonia de Extracción se desarrolló sin incidentes y el simbionte de Ba’al fue extraído y murió después de que el Anciano Tok’ra rompiera el contenedor que lo contenía. El huésped de Ba’al sobrevivió a la extracción y Vala planeó ayudarle a adaptarse.

Al mismo tiempo, el verdadero Ba’al viajó en el tiempo hasta 1939 utilizando el puesto de observación solar de Praxyon con un contingente de leales Jaffas para hundir el Aquiles con la Puerta Alfa a bordo antes de que pudiera llegar a los Estados Unidos. Sin embargo, el Coronel Cameron Mitchell de una línea temporal alternativa en la que el plan de Ba’al había tenido éxito estaba esperando y emboscó a las fuerzas de Ba’al junto a Bosun cuando salieron por el Stargate. Al ver a Mitchell, Ba’al sólo pudo mirarle atónito antes de que Mitchell disparara a Ba’al en la cabeza con una metralleta Thompson, matándolo finalmente. La muerte del verdadero Ba’al en 1939 y de su clon supuso el fin definitivo tanto de Ba’al como de los Señores del Sistema Goa’uld. (Stargate: Continuum)

Realidades alternativas

• En una realidad alternativa, Ba’al fue derrotado por el Comando Stargate en 2005 bajo las mismas circunstancias que ocurrieron en nuestra realidad. (SG1: «Ripple Effect»)

Líneas temporales alternativas

En 2008, durante la extracción de su clon, el verdadero Ba’al retrocedió en el tiempo hasta 1939 para cambiar la historia impidiendo que el Stargate de la Tierra llegara a América, lo que finalmente provocó que el Comando Stargate y el Programa Stargate nunca existieran. Cuando Ba’al llegó a la Tierra, llegó en la nave Aquiles y mató a la tripulación de una nave que transportaba el Stargate (incluido el capitán Mitchell, el abuelo del coronel Cameron Mitchell) y puso una bomba antes de salir por el Stargate para construir un nuevo imperio en esa época. El abuelo de Mitchell consiguió arrojar la bomba por la borda, donde explotó inofensivamente, pero el barco acabó atrapado en el hielo del Ártico, permitiendo que el plan de Ba’al funcionara para cambiar oficialmente la línea temporal. En esta línea temporal alternativa, Ba’al, conservando los conocimientos de la línea temporal anterior, se convirtió en el líder de los Goa’uld, utilizando sus conocimientos de la otra línea temporal para anticiparse a los movimientos de sus enemigos y destruirlos, además de ganarse el apoyo de otros Señores del Sistema. Ba’al también utilizó sus conocimientos de otras maneras: al prometer la creación de una Nación Jaffa Libre, Ba’al fue capaz de convencer a Teal’c de que se pusiera de su lado como su Primer Jefe. También convirtió a Qetesh, que seguía controlando a Vala Mal Doran, sin haber sido extraído de ella, en su Reina. Ba’al pasó a atacar la Tierra con una flota masiva, pero, habiendo quedado impresionado con los humanos de la otra línea temporal, abogó por no masacrarlos y esclavizarlos directamente, sino engañarlos. Sin embargo, Qetesh, sospechando del asombroso conocimiento que Ba’al tenía de la Tierra y de cómo se había anticipado a los movimientos de sus enemigos, se volvió contra él con el objetivo final de hacerse con el poder para sí misma y lo apuñaló con una espada. Sin embargo, lo mantuvo con vida el tiempo suficiente para interrogarlo a través de un dispositivo de mano con Ba’al, que estaba en un estado debilitado e incluso cerca de la muerte, revelando todo lo que sabía. Cuando Teal’c regresó, Ba’al esperaba ser liberado, sólo para que Teal’c se diera cuenta de que Qetesh lo mataría. Esto se demostró cuando Qetesh se volvió instantáneamente contra Teal’c antes de quitarle la espada a Ba’al, lo que no resultó en la muerte inmediata de Ba’al, sino también en que Ba’al se partiera por la mitad. El SG-1 -que había conseguido escapar de los cambios en la línea temporal viajando en un agujero de gusano de vuelta a la Tierra en el momento en que la historia cambió- consiguió utilizar su dispositivo y el Stargate para viajar de vuelta a 1929 (el tiempo más cercano al que pudieron llegar) para detenerlo, aunque sólo Mitchell lo consiguió.El Coronel Mitchell fue capaz de detener a Ba’al y arreglar la línea temporal de vuelta al curso correcto con la versión de la línea temporal alternativa de Ba’al, el clon y el verdadero Ba’al todos muertos. (Stargate: Continuum)

Apariciones

Apariciones de Ba’al

En orden cronológico:

• Stargate SG-1
  • Temporada 5
    • «Summit»
    • «Last Stand»
  • Temporada 6
    • «Abyss»
    • «Prophecy» (Mencionada)
  • Temporada 7
    • «Homecoming»
    • «Orpheus» (Mencionada)
    • «Avenger 2.0» (Mencionado)
    • «Fallout» (Mencionado)
    • «Evolution, Part 1» (Mencionado)
  • Temporada 8
    • «New Order, Part 1» (Mencionado)
    • «New Order, Part 2» (Mencionado)
    • «Zero Hour»
    • «Sacrifices» (Mencionado)
    • «Endgame» (Mencionado)
    • «Prometheus Unbound» (Mencionado)
    • «It’s Good to Be King» (Mencionado)
    • «Full Alert» (Mencionado)
    • «Reckoning, Part 1»
    • «Reckoning, Parte 2»
    • «Hilos»
  • Temporada 9
    • «Origen» (Mencionado)
    • «Los Poderes» (Mencionado)
    • «Cabeza de Playa» (Mencionado)
    • «Ex Deus Machina» (También duplicado del clon)
    • «El Cuarto Jinete, Part 2» (Mencionado)
    • «Ripple Effect» (Mencionado)
    • «Stronghold» (Sólo duplicado clon)
    • «Off the Grid» (Sólo duplicado clon)
  • Temporada 10
    • «Insiders» (También duplicados clonados)
    • «Uninvited» (Mencionado)
    • «Memento Mori» (Mencionado)
    • «The Quest, Parte 1»
    • «The Quest, Part 2»
    • «The Shroud» (Mencionado)
    • «Dominion» (Sólo duplicado del clon)
• Stargate: Atlantis
  • Temporada 5
    • «Search and Rescue» (Mencionada)
• Stargate: Continuum (También duplicado de línea temporal alternativa y duplicado de clon)

Personalidad

Aunque excepcionalmente despiadado, Ba’al parecía poseer una comprensión de la naturaleza humana algo mejor que la típica de los Goa’uld, y también tiene una vaga comprensión del concepto de humor. A diferencia del Goa’uld «típico», la personalidad de Ba’al era generalmente irónica y sardónica en lugar de melodramáticamente megalómana; sus métodos a menudo implicaban el engaño y el subterfugio en lugar de la fuerza bruta, y su estilo tendía a la insidia sutil en lugar de la crueldad absoluta.

En consonancia con su modus operandi más sutil, Ba’al también mantenía una imagen de refinamiento casi totalmente no militar, con una apariencia bastante menos amenazante de lo que era habitual en los Goa’uld. Tenía barba, pero era pequeña y se mantenía aseada, e incluso antes de adoptar la vestimenta terrestre también iba siempre bien vestido. En particular, mientras que la mayoría de los Goa’uld tienden a dejar que sus subordinados hagan la mayor parte de su trabajo, Ba’al estaba dispuesto a adoptar un enfoque más «práctico» en sus asuntos, lo que se aprecia sobre todo en su conocimiento detallado de la red de Stargates, lo que le permitió realizar hazañas tales como desarrollar un programa que podía marcar todos los Stargates de la galaxia simultáneamente.

Ba’al también se diferenciaba de la mayoría de los Goa’uld en que, a pesar de la crueldad mencionada anteriormente, sus motivaciones eran mucho más complejas que la simple maldad en un sentido moral absolutista. Era racional, adaptable y menos apegado a las trampas del poder; desde el colapso del Imperio Goa’uld, reconoció libremente que no es un dios (antes de la caída de los Goa’uld, trataba su «divinidad» con bastante ligereza a los que ya conocían el secreto -un marcado contraste con otros Goa’uld, que daban toda la impresión de creer realmente en su propia propaganda-, incluso admitiendo que no cree en ella, y diciendo que otros Goa’uld tampoco lo hacen realmente). Durante la guerra con los Ori, Ba’al comentó ocasionalmente que encontraba aspectos de la cultura humana «divertidos», e incluso llegó a dejar de usar en gran medida la voz simbionte distintiva de los Goa’uld, utilizándola sólo cuando intentaba intimidar a sus oponentes. Además, ha empezado a usar elementos de la moda terrestre del siglo XXI, incluso cuando está fuera del mundo.

En la realidad alternativa que creó, Ba’al también demostró que estaba dispuesto a romper el ciclo de megalomanía Goa’uld que resultaba en la conquista, prefiriendo negociar una especie de alianza con los Tau’ri (con él mismo en el control general) en lugar de simplemente masacrarlos y esclavizarlos. Incluso reprendió a Cronos por sugerirle que lo hiciera. Además, estaba dispuesto a consentir el establecimiento de una Nación Jaffa Libre, ya que eso significaba que podía convencer a Teal’c de que se pusiera a su servicio (aunque no está claro si realmente habría cumplido esta promesa si alguna vez se viera en la tesitura de tener que cumplirla). A pesar de las enormes implicaciones potenciales de esto una vez que Ba’al había consolidado el poder, resultó ser una apuesta que valió la pena, ya que la habilidad militar de Teal’c resultó ser inestimable para derrotar a los otros Señores del Sistema, y Ba’al se mostró dispuesto a mantener su palabra, proporcionando la mitad de Australia para los Jaffa Libres (a expensas de Camulus).

Ba’al sólo se preocupaba por sus propios intereses, y era un enemigo persistente del SG-1 y de los Tau’ri. Sin embargo, a lo largo de todo esto, mostró una capacidad muy poco característica para reconocer las amenazas universales, y ocasionalmente trabajó de forma cooperativa con el SG-1 durante breves periodos cuando reconocía que le convenía hacerlo. Esto implicaría que, aunque era egocéntrico y deseaba el engrandecimiento propio, no era puramente caótico, sino que a veces cometía acciones que comúnmente se definirían como malvadas, simplemente porque consideraba que dichos medios eran la forma más rápida y directa de obtener lo que quería.

Ba’al también era extremadamente inteligente y un brillante estratega militar, pero sus estrategias, aunque las utilizaba para derrotar a sus oponentes, siempre estaban dirigidas a darle más poder. También era un científico más que capaz, supervisando al menos algunos de sus experimentos y proyectos personalmente (SG1: «Abyss»), y demostró ser un astuto y sagaz hombre de negocios en la Tierra al hacerse cargo de The Trust.

Notas

• Ba’al fue el primer Goa’uld cuya extracción fue mostrada. También es el único Señor del Sistema conocido que fue extraído de su anfitrión.
  • Osiris fue una vez un Señor del Sistema, pero no lo era en el momento de su extracción de Sarah Gardner.

• Ba’al en el Léxico de Kathleen Ritter.
• El artículo de GateWorld sobre Baal en la Omnipedia de Stargate
• El artículo de Ba’al en la wiki de Stargate Worlds (enlace de reserva).
• El Ba’al mitológico en Wikipedia