Diagnóstico de los juanetes

Los médicos del NYU Langone diagnostican los juanetes examinando el pie. Esta condición hace que el dedo gordo del pie se gire hacia el segundo dedo. Como resultado de este cambio en la estructura ósea, se forma una protuberancia dura y ósea en la base del dedo gordo, donde una articulación conecta el dedo con el pie.

La desalineación en los huesos del pie causada por un juanete también puede causar metatarsalgia, la dolorosa hinchazón de la bola del pie. También puede provocar el desarrollo de un neuroma, que es la inflamación de un nervio que viaja entre los huesos de los pies y los dedos.

Si el juanete es grave y el dedo gordo se superpone al segundo dedo, encajar el pie en un zapato de talla estándar puede resultar difícil y doloroso. El diagnóstico precoz por parte de nuestros cirujanos ortopédicos y podólogos puede garantizar que el tratamiento comience antes de que esto ocurra.

Historia médica

Los médicos pueden hacer preguntas sobre cuándo notó por primera vez un juanete, si experimenta dolor en los pies o en los dedos, si ha tenido un juanete antes en uno o en ambos pies y si alguien más en su familia los ha tenido. Además, los médicos pueden preguntarle sobre el tipo de calzado que suele llevar y si tiene un trabajo que le obligue a estar de pie durante largos periodos de tiempo.

Examen físico

Un examen físico del pie suele ser todo lo que necesitan los médicos para confirmar un diagnóstico. Además de examinar el dedo gordo en busca de cambios en la estructura ósea, los médicos mueven suavemente el dedo para determinar si un juanete restringe el rango de movimiento o causa dolor, entumecimiento u hormigueo en el dedo o el pie.

Los médicos también pueden pedirle que camine unos pasos para ver cómo se distribuye el peso del cuerpo en el pie y los dedos.

Rayos X

Si un juanete provoca un dolor importante o cambia gravemente la forma del dedo gordo, los médicos pueden recomendar la realización de una radiografía. Una radiografía del pie revela hasta qué punto la articulación del dedo gordo se ha alejado de los demás dedos y si se ha visto afectado algún otro hueso del pie o de los dedos.

Ultrasonido

Si sus síntomas incluyen hormigueo o entumecimiento en el pie, y su médico sospecha que existe una inflamación en los nervios que discurren entre los huesos de los pies y los dedos, puede recomendar la realización de una ecografía.

La ecografía utiliza ondas sonoras de alta frecuencia que rebotan en los tejidos blandos del interior del cuerpo, captando los «ecos» que regresan en forma de imágenes.

Resonancia magnética

Su médico puede recomendarle una resonancia magnética si sospecha que los cambios en la estructura ósea del pie pueden haber provocado otros tipos de daños. Por ejemplo, si se ejerce una tensión excesiva sobre los dedos del pie durante el movimiento, puede desarrollarse una pequeña fractura llamada fractura por estrés. La IRM también puede revelar la inflamación de los nervios de los pies y los dedos.

La IRM utiliza un campo magnético y ondas de radio para crear imágenes bidimensionales y tridimensionales generadas por ordenador de los tejidos blandos del cuerpo.