Dolor irruptivo: definición, prevalencia y características
En la población oncológica, el término dolor irruptivo suele referirse a un brote transitorio de dolor en el contexto de un dolor crónico tratado con fármacos opiáceos. La prevalencia y las características de este fenómeno no se han definido, y se desconoce su impacto en la atención al paciente. Desarrollamos definiciones operativas para el dolor irruptivo y sus principales características, y las aplicamos en una encuesta prospectiva de pacientes con dolor oncológico. Se recogieron datos durante un periodo de 3 meses de pacientes consecutivos que declararon un dolor moderado o inferior durante más de 12 horas diarias y una dosis estable de opioides durante un mínimo de 2 días consecutivos. De los 63 pacientes encuestados, 41 (64%) informaron de dolor irruptivo, brotes transitorios de dolor grave o insoportable. Se describieron 51 dolores diferentes (mediana de 4 dolores/día; rango 1-3600). Las características del dolor eran muy variadas. Veintidós (43%) dolores eran de inicio paroxístico; el resto eran más graduales. La duración variaba de segundos a horas (mediana/rango: 30 min/1-240 min), y 21 (41%) eran tanto paroxísticos como breves (dolor lancinante). Quince (29%) de los dolores estaban relacionados con la dosis fija de opiáceos, ocurriendo únicamente al final del intervalo de dosificación. Veintiocho (55%) de los dolores fueron precipitados; de ellos, 22 fueron causados por una acción del paciente (dolor incidente), y 6 se asociaron a un precipitante no volitivo, como la flatulencia. La fisiopatología del dolor se consideró somática en 17 (33%), visceral en 10 (20%), neuropática en 14 (27%) y mixta en 10 (20%). El dolor estaba relacionado con el tumor en 42 (82%), con los efectos de la terapia en 7 (14%) y con ninguno de los dos en 2 (4%). Se emplearon diversas intervenciones para manejar estos dolores, con eficacia variable. Estos datos aclaran el espectro de los dolores irruptivos e indican su importancia en el tratamiento del dolor oncológico.