El baile inaugural beneficia a un empleado que murió durante la campaña
Aunque la mayoría de los eventos inaugurales son ya un recuerdo reciente, el martes hubo al menos un baile presidencial más importante, cuya recaudación beneficia a un empleado de Obama que murió durante la campaña.
Alex Okrent, de 29 años, murió en julio tras sufrir un colapso en la sede del presidente Barack Obama en 2012 en Chicago. Trabajaba en el departamento de medios pagados de la campaña, que se encarga de la publicidad. Llevaba con Obama desde 2004, trabajando como organizador de campo en la campaña para el Senado de Estados Unidos y luego para la campaña presidencial de 2008.
Las entradas para el baile del personal del martes por la noche en el Centro de Convenciones de Washington tenían un precio de 10 dólares cada una. Fueron invitados el personal de Obama for America, el de la Casa Blanca y el de la Administración, así como el del Comité de Inauguración Presidencial.
Obama dijo a los Miles que representan, en sus palabras, sus «más profundas esperanzas para América». Dijo que sabe que el futuro de la nación está en buenas manos. La primera dama, vestida con un conjunto plateado y negro, se hizo eco de la consigna del presidente durante la campaña electoral: «fired up, ready to go»
Los cantantes Tony Bennett y Lady Gaga actuaron. La estrella del pop se refirió al evento en Twitter, con un sencillo post que decía: «#whitehausball».
El presidente y la primera dama iniciaron la tradición del Baile del Personal en 2009 como una forma de expresar su gratitud a su personal y celebrar con ellos.