El Imperio Azteca
La mayoría de la gente hoy en día está algo familiarizada con el imperio azteca. Pero puede sorprenderle saber que hay un gran desacuerdo sobre qué tipo de «imperio» fue realmente. Esta historia del imperio azteca puede sorprenderte.
Por supuesto, incluso el término azteca es un poco engañoso. Es un nombre que se utiliza para un grupo de pueblos del centro de México, pero en realidad no había ningún grupo de personas que fuera «azteca». El pueblo mexica estaba en el corazón del imperio, pero había muchas otras culturas que formaban la civilización que los españoles iban a descubrir.
¿Qué tipo de imperio?
Si usamos el término imperio, tenemos que saber a qué nos referimos con él. Hubo muchos imperios a lo largo de la historia, y gobernaron a la gente de maneras muy diferentes.
Podría ser útil volver atrás y ver exactamente cómo empezó la civilización…
Historia del imperio azteca
Muchos años después de que el pueblo mexica construyera por primera vez su orgullosa ciudad, Tenochtitlan (que más tarde se convertiría en la Ciudad de México), formaron una alianza con otras dos ciudades: Texcoco (Tetzcoco) y Tlacopan (estas tres ciudades se muestran como puntos amarillos en el mapa de arriba). Esta triple alianza iba a gobernar el Valle de México hasta la llegada de los españoles. Sin embargo, con el tiempo una ciudad se convirtió en la más poderosa: Tenochtitlan. Se convertiría en el corazón de la civilización azteca.
Esencialmente, la historia del imperio es una historia de ciudades-estado. A medida que el imperio se expandía (lo que comenzó a hacer en serio alrededor de 1428) conquistó más ciudades. Algunas ciudades se resistieron. Otras fueron conquistadas y empezaron a pagar tributos.
Cómo se gobernaba el imperio
La ciudad de Tenochtitlan era el poder militar, que encabezaba la conquista de nuevos territorios. Pero el emperador azteca no gobernaba directamente cada ciudad estado. Los gobiernos locales permanecían en su lugar, pero se veían obligados a pagar diversas cantidades de tributo a la Triple Alianza (la mayor parte del tributo iba a Tenochtitlan).
Por esta razón, el académico Alexander J. Motyl llamaría a este imperio un imperio informal o hegemónico.
También hay que recordar que los aztecas no gobernaban necesariamente territorios conectados. Debido a que conquistaban ciudades, a veces tenían poder en «bolsillos» sobre un área.
Pero no piense que se trataba de un imperio débil. Gobernar a través de un gobierno local aseguraba que los locales mantuvieran al pueblo contento, y que hubiera estabilidad y continuidad. Este sistema funcionó muy bien para los pueblos del imperio.
En su apogeo
El imperio podría haber seguido creciendo si no hubieran llegado los europeos en 1519. En esta época estaba en su apogeo, llegando desde el Pacífico hasta el Golfo de México, desde el centro de México hasta Guatemala, El Salvador y Honduras. Vea este mapa del imperio azteca para tener una idea visual. Aquí hay otra concepción:
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