Into the Ocean

La canción contrasta un ritmo alegre y melodías ligeras con el erhu de Ryan Delahoussaye y las letras lamentables típicas de «Hate Me» y otras canciones escritas por el vocalista Justin Furstenfeld. Los sentimientos que transmite la canción reflejan la lucha de Furstenfeld en su vida real contra la depresión y las tendencias suicidas.

La letra transmite el relato en primera persona de un «chico normal» que se ha caído o ha saltado de la proa de un barco y los pensamientos que pasan por la mente del chico mientras pierde la voluntad de mantenerse a flote pisando el agua. Su último pensamiento es el de su amada, ya que acaba cediendo al ahogamiento: «Sólo pensé en tu cara, relajada y flotando en el espacio».

En la última estrofa la canción adquiere un significado más profundo, ya que la letra revela que la historia inicial del chico ahogándose era sólo un sueño espoleado por los sentimientos de dolor por la pérdida de un ser querido, presumiblemente la mujer cuyo rostro le daba consuelo mientras imaginaba que se ahogaba. El sueño es referido líricamente como «El recuerdo tardío de medianoche de la pérdida de ella, la que amo». La canción indica entonces que desea, como en el sueño, poder deslizarse «en el océano, acabar con todo».

Según un artículo de VH1-online sobre la banda, «Into the Ocean» ha afectado a muchos oyentes que pueden haber contemplado el suicidio. Furstenfeld dice: «Si he salvado a otros, no sé qué decir. Pero si puedo hacerlo por ellos, ¿por qué coño no puedo hacerlo por mí mismo?»