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Las situaciones especiales siempre han acercado a la gente, ya sean reuniones sociales, fiestas, bodas o simplemente un día con los amigos y la familia. El ser humano lleva organizando reuniones mucho antes de la invención de artilugios modernos como los teléfonos móviles, Internet o la electricidad, cuando hombres y mujeres se reunían para socializar a través de la música, la comida y la bebida. Estas reuniones de amigos, desconocidos y pequeños círculos surgen de diversas maneras o necesidades que pueden ser muy generales y específicas. Estar en el lugar adecuado en el momento oportuno y ser invitado a unirse a los festejos por un anfitrión gregario es una bendición para todos los demás. Los momentos de felicidad y de tristeza tienen el poder de acercar a las personas, dándoles prioridad y apoyándose mutuamente.

Aquí hay 10 situaciones de este tipo que acercan a las personas entre sí.

1. Un nuevo miembro- El nacimiento de un niño

Un nuevo bebé es como el principio de todas las cosas. Maravilla, esperanza, un sueño de posibilidades. La mejor sensación del mundo es cuando tu pequeño te coge del dedo por primera vez. Pregunta a tus padres cómo se sintieron cuando te cogieron en brazos por primera vez, la respuesta la obtendrás de la expresión de su cara. Es absolutamente una de las mejores situaciones que acercan a las personas. No sólo la pareja, sino también la familia, los abuelos, los tíos y todos los miembros de la familia se reúnen para celebrar y dar la bienvenida a una nueva vida.

1. Formación de nuevas relaciones

Según la definición del diccionario, el matrimonio es la unión de un hombre y una mujer para toda la vida por medio del matrimonio, una unión matrimonial particular. En realidad no es sólo la unión de un hombre y una mujer sino la unión de dos familias. El matrimonio es una ocasión con muchas funciones donde las personas se acercan, se forman nuevas relaciones y se construyen recuerdos. Los momentos del matrimonio son muy apreciados por la familia, los amigos y los parientes. Personas que eran desconocidas se convierten en amigos.

1. Compartir la alegría: las fiestas

Nuestros antepasados idearon estas sorprendentes prácticas llamadas fiestas para renovar las relaciones y mantenerlas. Si observamos los principales festivales de todas las religiones, ya sea el Diwali, el Eid o la Navidad, estos festivales nos acercan tanto a Dios como a los demás. Y todos los demás festivales del mundo unen invariablemente a la gente. Los festivales hacen que las relaciones sean más cálidas, la gente se visita, intercambia regalos y dulces y, en la tradición hindú, se tocan los pies de los mayores en señal de respeto, mientras que los mayores dan sus bendiciones. Los festivales aportan el sentimiento de unidad.

1. Miedo

Los niños no tienen miedo de hablar con extraños y suelen hacerse amigos rápidamente. A medida que crecemos, parece que nos asusta ofender a la gente y nos ocupamos demasiado de sonreír y saludar a las personas que no conocemos. Enfrentarse a nuestro miedo al rechazo e iniciar conversaciones suele ser la mejor manera de conocer a la gente. La gente suele ser amable cuando otra persona le hace una buena presentación.

1. Mudarse de casa

«La ausencia hace que el corazón se encariñe». Aunque nos mudemos de casa, pero la distancia nos acercará a nuestros seres queridos. Te das cuenta del valor de la familia y los amigos. Echamos de menos las pequeñas peleas con tus hermanos, la mirada de joven enfadado de tu padre, el regazo de tu madre y las salidas de un día con tus amigas. Esta distancia refuerza el vínculo emocional con tu familia y amigos. Disfrutamos de la anticipación del reencuentro y de la emoción de estar juntos. La distancia ayuda a apreciar más a las personas y a hacer más fuerte la relación.

1. Cualquier percance

El sufrimiento no es fácil. De eso se trata. Es difícil porque sólo en las situaciones difíciles crecemos realmente. Bueno algunas situaciones son felices y otras son tristes. Pero la vida se trata de altibajos, mientras que las situaciones felices acercan a la gente a celebrar, las tristes acercan a la gente a compartir los dolores de los demás. Si ocurre algo malo, como una enfermedad o una muerte, la gente se reúne para apoyarse y consolarse. Los lazos fuertes se forman en los entornos más duros. Ser capaz de sobrevivir con alguien a través de una experiencia dura te permitirá construir la confianza a un nivel más profundo.

1. Vacaciones

Ya sean vacaciones o un viaje de larga ruta, siempre es divertido estar con la familia o los amigos. Estar de acampada con alguien, o hacer el servicio militar juntos. Viajar te da los medios para crear recuerdos con tus hijos. Recuerdos que pueden durar toda la vida, cosas que compartirán con sus hijos y nietos, etc. Nos permite estar en un lugar nuevo y diferente fuera de lo normal, y podemos todo juntos. Coge esas vacaciones que siempre has querido con tu familia antes de que sea demasiado tarde y une más a tu familia

1. Los logros y los fracasos

Piensa en el momento en que tu hija se sacó la licenciatura con la primera clase, en el momento en que a tu hermano le publicaron su primera novela, toda tu familia lo celebró y cuando tu amigo no pudo aprobar el examen, tú estuviste a su lado. En todas estas situaciones te acercas a las personas, en sus logros los celebras y te sientes orgulloso y en los fracasos los apoyas y animas. La gente aprecia el apoyo y el cariño que les das y además os da la oportunidad de pasar tiempo de calidad juntos. Independientemente de la decepción del fracaso, los gestos de simpatía nos acercan más.

1. Peleas

Cuando te sientes frustrado por una cosa o tienes alguna falta de entendimiento, la mayoría de la gente pierde los nervios y se pelea. Aunque suene extraño, las peleas acercan a las personas, las dudas y los malentendidos se aclaran. Se discute durante un tiempo y, cuando el rencor sale a flote, se está más cerca del amigo o de la pareja que antes. De vez en cuando hay que limpiar las tuberías. Seguro que la cosa se pone fea, pero después las cosas fluyen mejor. Si, por el contrario, reprimes tu ira, al final se acumula tanto que puede sabotear toda la relación.

1. Intereses comunes

Los intereses comunes son siempre los mejores cuando se crea un vínculo con desconocidos. Normalmente necesitas encontrar una buena excusa para hablar con alguien, pero cuando ambos sois capaces de encontrar un interés compartido, eso se convierte en sí mismo en una conversación. A veces, hablas y hablas durante horas y te olvidas de preguntar el nombre del otro, pero la conexión es fuerte. Por eso las películas, la música y los deportes son temas estupendos, porque todos tienen algún interés en ellos. No hace falta que os gusten las mismas películas, el mismo equipo deportivo y las mismas canciones para poder intimar. Lo único que se necesita es ese pequeño vínculo.

La expresión es el máximo poder del ser humano que nos acerca a los demás, sin embargo, los humanos tenemos la manía de ocultar nuestros sentimientos y embotellarlos hasta que se pudren. De este modo, a menudo perdemos a las personas que más queremos. Por eso, hay que seguir diciéndole a nuestros seres queridos todo lo que sentimos en nuestro corazón y hacer que no sólo lo demuestren sino que se den cuenta de que son importantes. Que cuentan.