Vitamina C tamponada vs no tamponada: ¿Cuáles son los beneficios?

Por Venus Ramos, MD

La vitamina C es probablemente el más familiar de todos los nutrientes. Puede que la hayas tomado para combatir un resfriado. Tal vez la hayas usado para minimizar las arrugas de la piel. Sin embargo, los beneficios de la vitamina C van mucho más allá.

La vitamina C es esencial para el crecimiento y la reparación de los tejidos del cuerpo, incluidos los huesos, la piel y los vasos sanguíneos. El cuerpo no puede producirla y debe reponerla diariamente. Como potente antioxidante, puede combatir los efectos dañinos de los radicales libres, por lo que se asocia a la prevención de enfermedades como el cáncer, las cataratas y las cardiopatías. Puede ayudar a acelerar la cicatrización de las heridas, reforzar el sistema inmunitario y contribuir a la absorción del hierro.

Para prevenir la carencia de vitamina C, la ingesta diaria recomendada para los no fumadores es de 90 mg/día para los hombres y 75 mg/día para las mujeres; para los fumadores, 125 mg/día para los hombres y 110 mg/día para las mujeres. Para gozar de una salud óptima, las investigaciones han demostrado los beneficios de tomar al menos 400 mg de vitamina C al día. De hecho, hay muchos profesionales de la salud que aconsejan al menos 1000 mg/día. El límite superior de la ingesta diaria que probablemente no suponga ningún riesgo es de 2000 mg/día.

La vitamina C también se conoce como ácido ascórbico. Aunque se considera un ácido débil, no hace que su cuerpo sea más ácido. De hecho, los alimentos ricos en vitamina C son alcalinizantes porque, a medida que el cuerpo quema el ácido, deja un producto final alcalino. Sin embargo, la acidez puede seguir afectando a su estómago, ya que la vitamina C viaja al tracto gastrointestinal. Por lo tanto, si evita los alimentos ácidos debido a su sensibilidad estomacal -tal vez tenga una afección gástrica como el reflujo ácido o una úlcera péptica-, le conviene tomar una forma tamponada de vitamina C.

La vitamina C tamponada se crea cuando se añade una sal mineral al ácido ascórbico. Esto da lugar a una sustancia que resiste los cambios de pH, proporcionando una mejor opción de formulación para aquellos con estómagos sensibles.

California Gold Nutrition le da esa opción. Esta marca ofrece productos de suplemento de vitamina C tamponada y no tamponada disponibles en varias formas, incluyendo cápsulas, gomitas y polvos.

Los polvos pueden ser especialmente convenientes porque usted puede personalizar su dosis. La forma de polvo es ideal para añadir a las recetas como estas también.

Batido de limón y arándanos

Ingredientes:

• 1 taza de leche de almendras sin azúcar
• 1 taza de verduras de elección
• 1 cucharada de vitamina C (o Buffered Gold C) en polvo
• 1 cdta. semillas de chía
• 2 ramitas pequeñas de perejil fresco
• 1 cucharadita de mantequilla de almendras o anacardos
• ¼ cucharadita de ralladura de limón
• Jugo de ⅛ de un limón mediano
• 1 a 1½ tazas de arándanos congelados (1½ tazas para un batido más espeso)

Instrucciones:

1. Agregar los primeros ocho ingredientes en una licuadora y batir hasta que esté suave.
2. Añadir los arándanos congelados y volver a batir.

Abono matutino

Ingredientes:

• 1 taza de leche de almendras sin azúcar
• 1/3 de taza de copos de avena
• 1 cucharada de vitamina C (o Buffered Gold C) en polvo
• 1 cda. de lino molido
• 1 cucharada de aceite de coco
• 1/4 cdta. de canela
• 1 plátano, opcional
• 1 cucharadita de sirope de arce puro, opcional
• 1 cucharadita de ralladura de naranja, opcional

Instrucciones:

1. Calienta la avena y la leche de almendras en una olla al fuego hasta que el líquido se haya absorbido casi por completo.
2. Agregar el lino, la canela, el aceite de coco y la vitamina C en polvo a la olla.
3. Revolver hasta que el aceite de coco se haya derretido y todos los ingredientes estén bien combinados.
4. Retirar del fuego.
5. Servir en un bol cubierto con cualquiera de los siguientes elementos: ralladura de naranja, plátano en rodajas, un chorrito de jarabe de arce.

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