Herramientas para la ansiedad: Los consejos de un experto

Usa tus sentidos

La ansiedad reduce tu atención a las amenazas percibidas (es decir, a lo que sientes miedo o preocupación en ese momento), lo que puede afectar a tu concentración y memoria. Practica la ampliación de tu visión utilizando tus sentidos – qué ves, oyes, hueles, etc. – para mejorar la atención y la experiencia.

Ten gratitud

Practica la gratitud como otra forma de ampliar tu enfoque. Están las cosas que te preocupan y también están las cosas por las que estás agradecido.

Acepta

La dificultad con la incertidumbre y la falta de control percibido amplifican la ansiedad. Para «arreglar» esto, a menudo intentamos obtener más certeza y más control, por ejemplo, haciendo búsquedas en Internet sobre los síntomas de salud. Esto en realidad aumenta la ansiedad a largo plazo.

El antídoto es la aceptación de la incertidumbre y el control. Puedes leer un libro o ver un evento deportivo sin saber el final. De hecho, ¡es la anticipación lo que lo hace emocionante! Así que prueba a adoptar esta actitud de apertura al no saber, y a soltar el control. A ver qué pasa.

Afronta tus miedos

La evitación es cualquier cosa que haces, o no haces, para sentirte menos ansioso y evitar que ocurra un resultado temido. Por ejemplo, evitar una situación social, consumir drogas o alcohol, o dejar las cosas para después son ejemplos de evitación.

Cuando evitas lo que temes, obtienes un alivio a corto plazo. Sin embargo, este alivio nunca dura, y antes de que te des cuenta, esa ansiedad ha vuelto, a menudo con sentimientos de tristeza o vergüenza por haberla evitado. Y a menudo, las mismas estrategias de evitación que utiliza para sentirse mejor y evitar el resultado temido (por ejemplo, leer sus notas durante un discurso o evitar el contacto visual) en realidad crean el resultado que está tratando de evitar (es decir, parecer ansioso o incompetente).

Considere la posibilidad de dar pequeños pasos para comenzar a enfrentar sus temores. ¿Qué podría hacer para salir de su zona de confort? Construirás dominio y confianza, y tu ansiedad podría incluso disminuir en el proceso.

Define tus valores

Haz un examen de conciencia sobre lo que realmente te importa. ¿Quién quieres ser? ¿Qué quieres representar? ¿Qué cualidades deseas encarnar cuando te dedicas al trabajo o a la escuela, o cuando interactúas con las personas que te importan? Si la amistad es importante, ¿cómo puedes crear un espacio en tu vida para ello? Cuando lo hagas, ¿qué cualidades deseas encarnar cuando pases tiempo con tus amigos? ¿Deseas ser auténtico? ¿Compasivo?

Todo esto son valores, y tomar decisiones en consonancia con los valores -en lugar de al servicio de la evasión- puede o no repercutir en su ansiedad, pero sin duda añadirá riqueza, vitalidad y sentido a su vida.