¿Son las velas aromáticas malas para la salud?

Es esa época del año de nuevo: bajan las temperaturas, llega el tiempo lluvioso y todo lo que quieres hacer es acurrucarte dentro de casa con una buena vela perfumada.

Pero, el amor de la nación por las velas podría estar dañando el medio ambiente, así como causando daños a nuestro cuerpo, debido a las peligrosas toxinas que liberan.

En un movimiento positivo, a principios de este año, Michael Gove (que era el Secretario de Medio Ambiente en ese momento) dijo que los fabricantes de velas tendrán que reducir las emisiones en sus velas perfumadas.

Afortunadamente, no todas las velas son perjudiciales, así que es bueno saber qué es lo que hay.

¿Por qué son peligrosas las velas?

Todo se reduce a un ingrediente.

La mayoría de las velas perfumadas contienen cera de parafina, que se deriva del petróleo, el carbón o el aceite de esquisto. Cuando se quema, la parafina libera compuestos tóxicos en el aire, como la acetona, el benceno y el tolueno, todos ellos carcinógenos conocidos.

Así que no sólo dañan el medio ambiente, sino también nuestra salud.

Un estudio de la Universidad Estatal de Carolina del Sur descubrió que las velas de parafina desprenden humos nocivos relacionados con el cáncer de pulmón y el asma, aunque los investigadores afirmaron que serían necesarios años de uso regular para que supusieran un riesgo significativo para la salud.

Lamentablemente, las malas noticias no acaban ahí.

Las velas de parafina también producen una buena cantidad de hollín -la sustancia negra que se produce al parpadear las llamas- y cuando el hollín se transmite por el aire puede ser inhalado.

Estas partículas pueden llegar a lo más profundo de los pulmones, así como al tracto respiratorio inferior y a los alvéolos, según un estudio publicado en MSD Manual – y esto no suena demasiado saludable.

A pesar de los riesgos, las marcas tienden a utilizar la parafina porque es más barata que otros tipos de cera. También ayuda a crear una fragancia más fuerte que la de las ceras naturales.

En marzo, Douglas Booker, del Servicio Nacional de Pruebas de Calidad del Aire (NAQTS), compartió su opinión con el Daily Mail, y dijo: «Cuando se queman las velas perfumadas, desprenden partículas diminutas, tan pequeñas que podrían caber mil de ellas en un solo cabello humano.

«El problema de estas partículas tan pequeñas es que pueden entrar en el torrente sanguíneo y se han asociado a problemas de salud a corto y largo plazo, como el asma y las enfermedades cardiovasculares.

¿Todas las velas son tóxicas?

La respuesta corta es no, lo que será música para los oídos de mucha gente – el truco es optar por velas naturales, hechas de recursos renovables.

Las velas de cera de soja son una gran alternativa, ya que no contienen contaminantes tóxicos y producen mucho menos hollín que un producto de parafina. Estas velas no arden tanto como las de parafina, pero su combustión es más lenta, por lo que suelen durar entre un 30 y un 50% más.

Cabe destacar que, aunque las velas de soja parezcan una opción ecológica, no dejan de ser un subproducto de la industria de la soja, que suscita cada vez más preocupación por la deforestación y el uso de pesticidas y fertilizantes.

Las velas de cera de abeja son otra opción. Pueden ayudar a limpiar el aire mientras se queman, ya que se dice que liberan iones negativos que eliminan el polen, las esporas de moho, las bacterias y los virus. También suelen arder durante más tiempo que las velas de parafina y de soja. Aunque, como su nombre indica, estas velas no son adecuadas para los veganos.

Algunos otros productos de cera también están hechos de minerales y vegetales, y suelen liberar menos partículas en el aire cuando se queman. Marcas como Jo Malone utilizan este tipo de ingredientes en sus velas, pero suelen tener un precio elevado.

También es importante saber cómo se fabrican las velas para que huelan bien.

Las fragancias naturales se crean con aceites esenciales -derivados de plantas y flores- mientras que las fragancias sintéticas están hechas por el hombre, normalmente a partir de productos químicos derivados del petróleo. Esto significa que vuelves a estar expuesto a toxinas peligrosas.

Nathalie Allard, fundadora de la empresa de velas ecológicas Petits Rituels, dijo: «En el caso de los aceites esenciales, no hay peligros (siempre que no los inhales en su forma concentrada).

‘Una vez que los aceites naturales se inhalan en el cuerpo, se re-modulan y actúan de forma amigable’

¿Quién está en riesgo?

Cualquier persona que queme una vela perfumada, o esté cerca de ella, podría correr el riesgo de inhalar las partículas emitidas.

Las sustancias químicas que desprenden las velas de parafina pueden ser especialmente perjudiciales para las personas con afecciones respiratorias, como el asma.

Emma Rubach, jefa de asesoramiento sanitario de Asthma UK, declaró a Metro.co.uk: «Las velas perfumadas podrían provocar que las personas con asma tosieran, tuvieran sibilancias o incluso sufrieran un ataque de asma potencialmente mortal, ya que los fuertes aromas de los productos perfumados podrían ser un desencadenante para unos 2,5 millones de personas con asma en el Reino Unido.

«Aunque todavía no sabemos con exactitud qué productos químicos o fragancias son los más propensos a desencadenar el asma en las personas, nuestro consejo es que las personas las eviten si notan que tosen más o tienen síntomas como la falta de aliento cerca de las velas perfumadas.

«Aunque es difícil evitar los olores de las velas, puedes decir a tus amigos y vecinos cómo te afectan y pedirles que no las usen cuando estés cerca. También puedes probar a utilizar velas de té a pilas si quieres crear un ambiente tranquilo sin riesgo de desencadenar un ataque.’

¿Qué hacer si te gustan las velas?

El conocimiento es poder.

Cuando compres velas nuevas, comprueba la lista de ingredientes.

Busca una vela sin aroma o una cera perfumada con aceites esenciales, en lugar de una fragancia sintética.

Tampoco te dejes engañar por el etiquetado «natural». Los expertos de la industria han dicho que las empresas de velas sólo necesitan incluir un 51% de ingredientes naturales para llamar a un producto ‘natural’ – el resto puede ser sintético.

Quemar las velas durante menos tiempo es una buena manera de reducir la cantidad de partículas enviadas al aire y mantener una habitación bien ventilada también ayudará.

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